Hace ahora tan sólo un año que el Círculo de Empresarios, en colaboración con la prestigiosa Wharton School, de la Universidad de Pennsylvania, presentaba públicamente la primera edición del Anuario de Internacionalización de la empresa española. Nacía éste con vocación de tomar el pulso permanentemente a la situación de nuestras empresas fuera de nuestras fronteras, en un contexto global cada vez más exigente. Entendíamos esta publicación como un instrumento útil, no sólo para ofrecer una visión de la actividad de las empresas españolas en el extranjero, sino también para animar a esa necesaria internacionalización a quienes todavía no se habían atrevido a dar ese paso o se mostraban aún dubitativos. Hace ahora tan sólo un año que el Círculo de Empresarios, en colaboración con la prestigiosa Wharton School, de la Universidad de Pennsylvania, presentaba públicamente la primera edición del Anuario de Internacionalización de la empresa española. Nacía éste con vocación de tomar el pulso permanentemente a la situación de nuestras empresas fuera de nuestras fronteras, en un contexto global cada vez más exigente. Entendíamos esta publicación como un instrumento útil, no sólo para ofrecer una visión de la actividad de las empresas españolas en el extranjero, sino también para animar a esa necesaria internacionalización a quienes todavía no se habían atrevido a dar ese paso o se mostraban aún dubitativos. La clave de este éxito tiene mucho que ver con Wharton School, uno de los centros académicos de mayor prestigio a nivel internacional en todo lo referente al mundo de la empresa. Y también con el hecho de distinguir a las operaciones más relevantes de empresas españolas en el exterior, subrayando algo tan esencial como es el reconocimiento de que, aunque queda aún mucho camino por recorrer en el proceso de internacionalización de nuestras empresas, existen claros y contundentes ejemplos de compañías con una firme trayectoria de éxito fuera de nuestras fronteras. La competitividad de la economía española se encuentra en el eje de todas las reflexiones que el Círculo de Empresarios viene desarrollando a lo largo de los últimos años. En este contexto, la internacionalización de la empresa española es una de las mejores estrategias, en muchos casos, para alcanzar y mejorar su competitividad. Experimentamos actualmente las consecuencias de una crisis global que nos demuestra, con crudeza, que el mundo ya no conoce fronteras. Actuar con este convencimiento será la mejor forma de superar esa crisis y de cimentar sobre bases muy sólidas el futuro de nuestras empresas.