La crisis sanitaria motivada por la pandemia de la Covid-19 ha tenido un gran impacto en la economía española que se ha traducido en un alto coste en términos de crecimiento y empleo.
A su vez, ha supuesto una disrupción de las dinámicas comerciales internacionales y las cadenas de suministro. Todo ello ha puesto al descubierto también las debilidades de nuestro modelo productivo. El contexto es de notable incertidumbre, pero debemos aprovechar para actuar sobre todos esos factores que influyen en la competitividad y salir de la crisis con un modelo productivo más competitivo. Pero ¿cuáles son?.
Primero analizamos cómo estamos en diversos aspectos en relación con los países de nuestro entorno de manera estática, en 2019, de acuerdo con el índice del World Economic Forum.
Después analizamos cómo han evolucionado esos factores de competitividad entre 2007 y 2017 con metodología homogénea para detectar tendencias de mejora o empeoramiento. A la vista del análisis, centramos la atención en una serie de factores específicos de competitividad que separan a nuestro país del grupo de los más competitivos dentro de la OCDE y sobre los que debemos actuar.
El entorno cada vez va a ser más dinámico e incierto y esto exigirá tomar decisiones con márgenes de tiempo escasos e información limitada si queremos asegurar nuestra competitividad futura. En el último capítulo hacemos una serie de propuestas de mejora y recomendaciones, estimando el impacto esperado y el plazo en el que se observaría.